Ante acorralamiento gobierno haitiano ofrece paliativos

Manifestantes haitianos queman la bandera de Estados Unidos, país al que acusan de apoyar la corrupción del gobierno haitiano

Puerto Príncipe, HAITÍ.- Acorralado por una grave crisis económica, social y política, el gobierno del presidente Juvenel Moise, a través del primer ministro, Jean Henry Céant, ha prometido al pueblo haitiano, que desde hace varias semanas se ha lanzado a las calles en violentos disturbios contra la corrupción en el manejo de los fondos de Petrocaribe, y en demanda de la renuncia del mandatario, que dispondrá una reducción en los precios de los artículos básicos de consumo, la posibilidad de un aumento del salario mínimo, y la reducción de los gastos de la administración pública.

Las protestas hasta ahora han arrojado un balance de 9 muertos, y, tras una relativa calma el sábado, se han recrudecido con quemas de neumáticos en las vías públicas, bloqueos de carreteras, y saqueos de tiendas y establecimientos comerciales.

El funcionario reconoció que existe una aguda escasez de alimentos y combustibles, producto de la corrupción y el contrabando, por lo que, en un desesperado esfuerzo por contener la ira de los haitianos, ha reconocido que ha habido mal manejo de los fondos de Petrocaribe, un programa de petróleo a bajo precio con que el gobierno de Venezuela ha favorecido a varios Estados, especialmente latinoamericanos, incluyendo República Dominicana.

"Necesitamos dar ejemplo con las personas que robaron el dinero de Petrocaribe", sentenció Céant, a la vez de anunciar medidas para contener el contrabando en la frontera con República Dominicana.

Las protestas son motorizadas por el denominado Sector Democrático y Popular, que ha rechazado el llamado a diálogo del presidente Moise, quien se sumó al coro de gobiernos que desconocen al presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, y apoyan al diputado de la Asamblea Nacional, Juan Guaidó, autoproclamado "presidente encargado" de Venezuela.